Barcelona acoge una cumbre clave para impulsar la colaboración en supercomputación entre Europa y Japón

03 Febrero 2025

Organizado por el BSC, el evento consolida la colaboración en investigación y tecnología entre Europa y Japón en el dinámico campo de la supercomputación

En el marco del proyecto HANAMI, el Barcelona Supercomputing Center - Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS) organizó en Castelldefels del 13 al 15 de enero el Simposio de Alto Nivel (HLS) sobre “Colaboración UE-Japón en Computación de Alto Rendimiento (HPC)”, que reunió a destacados investigadores, responsables políticos y actores clave de ambas regiones para discutir el futuro de la HPC y el papel de la colaboración internacional para abordar desafíos globales, como el cambio climático, los nuevos materiales y los avances biomédicos.

Durante tres días, el evento contó con más de 50 presentaciones y más de 80 participantes de ambas regiones, subrayando la importancia de la colaboración transcontinental para acelerar la innovación en HPC.

Acelerando la innovación a través de la colaboración UE-Japón

El simposio proporcionó una plataforma única para que investigadores europeos y japoneses intercambiaran ideas, compartieran conocimientos y discutieran innovaciones conjuntas.

Kosuke Nakano, del Instituto Nacional de Ciencia de Materiales (NIMS) de Japón, destacó el valor del evento: "Esta conferencia fue excepcional porque reunió a investigadores japoneses y europeos que habían colaborado individualmente; ahora estamos discutiendo proyectos futuros de manera colectiva".

Nakano también enfatizó el papel del proyecto HANAMI en fomentar la colaboración: "Con HANAMI, podemos intercambiar conocimientos comunes para acelerar la colaboración entre Europa y Japón. Hacerlo a través de nuestras investigaciones, lo cual es muy gratificante, es una excelente oportunidad para compartir nuestro conocimiento".

Erik Lindahl, profesor de Biofísica en el KTH de Estocolmo, compartió este sentimiento, mencionando las ventajas únicas de trabajar con Japón: "El proyecto HANAMI brinda la oportunidad de trabajar con algunos de los profesionales más talentosos del mundo en este campo, que casualmente se encuentran en Japón. Hay muchas colaboraciones con EE. UU., pero los equipos tienden a olvidar que hay un nivel de competencia igual de alto en Japón".

Lindahl profundizó en las fortalezas complementarias de ambas regiones: "Japón siempre ha definido sus propios caminos y desarrollo científico. Sus arquitecturas informáticas son completamente diferentes al resto del mundo. Tienen herramientas de escalado mucho mejores. Por otro lado, creo que hemos sido más hábiles cuando se trata de adaptar aplicaciones o aceleradores, lo que crea un intercambio de ideas muy beneficioso y equilibrado".

Oportunidades y desafíos clave en dominios científicos

El simposio contó con sesiones especializadas en modelado climático, aplicaciones biomédicas y ciencia de materiales, mostrando las áreas donde la colaboración UE-Japón puede tener el mayor impacto.

Lindahl elogió la experiencia multidisciplinaria de Japón en ciencias biomédicas: "Tanto Japón como Europa son excepcionalmente hábiles en ciencias de la vida; hemos desarrollado algunas de las herramientas líderes en el mundo. En cuanto a Japón, lo que más me impresionó durante esta conferencia fue la vasta competencia de sus profesionales, no solo en la comprensión de moléculas, sino también en otros aspectos biológicos, como la comprensión y predicción de enfermedades, así como el desarrollo de células. También fue importante observar la cantidad de trabajo concreto que ya está en marcha entre Europa y Japón".

Alfonso Valencia, director de Ciencias de la Vida del BSC, destacó la colaboración de su equipo con investigadores japoneses en proyectos genómicos, incluida la investigación sobre el cáncer bajo el Consorcio Internacional del Genoma del Cáncer: "Esta colaboración nos permite combinar genómica con métodos avanzados de simulación y aprendizaje automático, desbloqueando nuevas perspectivas sobre los orígenes del cáncer y posibles tratamientos".

En cuanto al área climática, Samuel Hatfield, del Centro Europeo de Previsión Meteorológica a Medio Plazo (ECMWF), discutió los desafíos técnicos y oportunidades en optimizar el rendimiento en supercomputadoras europeas y japonesas: "Cuando busco beneficiarme de horas de computación en una supercomputadora japonesa, debo aprender un conjunto ligeramente diferente de procedimientos de los equivalentes europeos. También tienden a adquirir hardware ligeramente diferente al de las máquinas europeas. Por lo tanto, aunque desarrolle un código que funcione muy bien en una supercomputadora europea, no funcionará automáticamente muy rápido en una supercomputadora japonesa. Garantizar una portabilidad de rendimiento adecuada entre ambas requiere una fuerte colaboración con colegas japoneses".

Abordando la competitividad global en HPC

El simposio también abordó la creciente competitividad de la HPC en Europa, Japón y Estados Unidos. Rio Yokota, del Instituto de Ciencia de Tokio y experto en HPC e Inteligencia Artificial (IA), destacó la importancia de la colaboración para contrarrestar el dominio de las gigantes tecnológicas estadounidenses: "Europa y Japón tienen supercomputadoras muy grandes; pero con el estado actual de la IA, EE.UU. – especialmente las grandes empresas tecnológicas – son los líderes cuando se trata de las máquinas más potentes. De hecho, sus máquinas son mucho más potentes que nuestras supercomputadoras. Es muy importante para nosotros, especialmente en Japón, colaborar con los países europeos y compartir nuestros recursos para competir con estas empresas dominantes de IA".

Visión unificada para el futuro

El simposio concluyó con una llamada a una cooperación sostenida y ampliada entre Europa y Japón para el futuro de la HPC.

En cuanto al campo de las ciencias biomédicas, Europa y Japón están colaborando e intercambiando códigos en ambos sentidos. "Uno de los mejores ejemplos es que, históricamente, hemos estado satisfechos con escalar nuestros códigos, pero eso se está desmoronando. Ahora, con los algoritmos que teníamos antes, habría sido virtualmente imposible escalar hasta un millón de núcleos. En este sentido, los profesionales japoneses han desarrollado algunas herramientas que permitirán eso, y ahora están integrando esas herramientas en nuestro código europeo en GROMACS – lo que nunca habría sucedido sin HANAMI. Es un ejemplo increíble de la oportunidad que HANAMI ofrece para el futuro de la HPC", dijo Lindahl.

Fabrizio Gagliardi, responsable de cooperación estratégica internacional en el BSC, expresó su satisfacción con los resultados del evento: "Estoy muy complacido porque, desde mi perspectiva, tuvimos mucha discusión e interacción dentro de los paquetes de trabajo, pero también con la audiencia más amplia, revisando la colaboración y explorando oportunidades con las instituciones japonesas que participaron en el evento". Gagliardi también destacó la mejora en la colaboración, especialmente en el área de las ciencias de la vida, como un logro clave, particularmente a través de actividades bilaterales, a pesar de los recursos de financiación desequilibrados en Japón.

Este evento incluyó dos eventos paralelos: la CEA-RIKEN School: Kokkos Training, centrada en las capacidades de programación de Kokkos, con conferencias y capacitación práctica de expertos de alto nivel en Kokkos para varios estudiantes de Japón y Europa que participaron en el evento. Además, el Taller de Sostenibilidad HANAMI sobre “Diálogo Estratégico UE-Japón sobre Colaboración en Computación de Alto Rendimiento” reunió a responsables políticos nacionales, financiadores y actores clave para explorar el papel crucial de la colaboración UE-Japón en el avance de la colaboración internacional en HPC. Este evento híbrido fue asistido por más de 60 participantes de diferentes instituciones y autoridades, como el Ministerio de Educación, Cultura, Deportes, Ciencia y Tecnología (MEXT) en Japón, la embajada francesa en Japón y contribuciones de centros EuroHPC europeos, como GENCI.