El BSC tiene la doble función de ser tanto una infraestructura de investigación como un centro de investigación y su rendimiento en ambas áreas se refleja en la obtención de varios distintivos y en su participación en prestigiosos proyectos internacionales.
En el 2011 el BSC fue uno de los ocho primeros centros de investigación en España que recibió el codiciado distintivo Severo Ochoa por su excelencia en investigación. Este reconocimiento, que tiene una duración de cuatro años y una dotación económica de 4 millones de euros, le fue concedido de nuevo al centro para el desarrollo de un programa en el periodo 2016-2019. En 2022 el BSC logró la acreditación de Centro de Excelencia Severo Ochoa para el período 2023-2026.
Como infraestructura de investigación, el BSC es uno de los únicos seis socios que albergan la infraestructura de supercomputación distribuida en Europa PRACE.
El centro también alberga a siete profesores de ICREA y varios de sus investigadores cuentan con distintivos ERC.